lunes, 14 de noviembre de 2011

Secretos paleontológicos en la Dama de Elche

La Dama de Elche y la paleontología están más relacionadas de lo que podemos pensar. La roca esculpida miles de años atrás guarda en su interior una historia de más de 10 millones de años.

En el año 2006, con motivo de la cesión temporal de la Dama de Elche a su lugar de origen, se realizaron varios estudios geológicos y de conservación por el CSIC (Madrid) y el CNRS (París). Entre los resultados petrográficos, de policromía y mineralógicos nos llama la atención los referidos a la facies (ambiente de formación) de la roca caliza en la que fue esculpida.

Desde su estancia en el museo del Louvre, se conservaba una pequeña esquirla de dimensiones milimétricas de la escultura de Elche que fue aprovechada para obtener una lámina delgada y proceder así a su estudio microscópico. Este análisis permitió obtener la filiación de la roca y de ese modo se procedió a buscar la facies rocosa e incluso la cantera de la que procedía.

La roca resultó ser una caliza biodetrítica del Mioceno medio con estratificación poco marcada, de color amarillo verdoso, formada por una acumulación de foraminíferos planctónicos y bioclastos (equinodermos, briozoos, moluscos), además de algunos gránulos de glauconita, algunos pasan a litoclastos secundarios (dolomía gris, arcillas triásicas y calizas nummulíticas, etc.) y muchas huellas de bioturbación (cuevas): son las "Calizas del Vinalopó" (Montenat, 1977), bien desarrolladas en la zona de El Ferriol (al N de la ciudad de Elche).

La microfauna planctónica abunda con Orbulina sp., Globorotalia mayeri, Globigerina woodi, etc., indica una edad Serravalliense (entre 13,8 y 11,6 millones de años). La abundancia de foraminíferos con cámaras globosas permite deducir que eran flotadores y por lo tanto planctónicos, sus caparazones fueron depositándose en el lecho de un mar profundo a medida que morían. Las descripciones hablan de microfacies A y sus fósiles permiten distinguirla de otras microfacies B y C de la zona, todas ellas están presentes en la estatuaria ibérica de la Alcudia de Elche y otros yacimientos cercanos.

Puede comprobarse de este modo, que la Dama de Elche posee una historia en su interior más antigua que la que nos cuenta la propia escultura. Algo que, sin duda, incrementa su valor patrimonial y posibilita nuevas formas de valorización.

(datos tomados de Gagnaison, C., Montenat, C., Barrier, P. y Rouillard, P. L’environnement du site ibérique de La Alcudia et les carrières antiques de la Dame d’Elche. ArcheoSciences, revue d’archéométrie, 31, 2007, p. 59-78).

Francisco Vives Boix

MUPE

1 comentario:

  1. Francisco, me dejáis de piedra. Enhorabuena por vuestra obra y sobre todo por vuestra trayectoria.

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